
Era una mañana cualquiera. Sarah se levantó de la cama tras escuchar la alarma del despertador.
Estaba nerviosa, confundida y perdida. Aquél día, desembarcaba su vida en aquel puerto de Barcelona, aquello que había anhelado durante los últimos meses... Aquél día, volvía a reunirse con él.
1 comentario:
ME encanta esta entrada, todo una foto increible, y unas palabras preciosas.
Te quieor, y nunca dejes todo esto.
Si, la foto e smia, te gusta cariño?
Z
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